Caballo de cartón

Intenso "weekend" el vivido en Madrid, cumpliendo el guión, tal y como estaba previsto.

Estuvimos acompañados por un tiempo más parecido al londinense, por sus continuos cambios, de sol a lluvia, de calor a fresco, de paraguas a sombrillas...

Nos movimos bien con nuestro "Caballo de cartón" (Tirso de Molina, Sol, Gran Via, Tribunal... / Sabina).

Descubrimos una zona no conocida por nosotros, pero recomendada por otros, llamada "zona de huertas", y es que al venir de Murcia, no podiamos pasar por alto ese término (huertas) y pasamos a la acción para adentrarnos en la noche madrileña.

Zona próxima a la puerta del Sol, concretamente en un lateral de la fachada principal del edificio de Tio Pepe, en su parte derecha. De equivocarte y pasarte al lado izquierdo, accederias a la calle de la Montera, singular donde las haya (junto con la calle de La Ballesta) y por todos conocida por la cantidad de "señoritas" que tratan de ganarse la vida a cambio de hacer "buen" servicio al que se le acerque...

Me pareció vulgar para la ciudad y para el ciudadano de a pie que se encuentre con este "pastel", en pleno centro, mientras pasea con niños, con su propia pareja, etc... Además, tampoco es una calle donde uno se pueda recrear la vista sino más bien todo lo contrario. Algunas, no dan para mas...




Esto, sin embargo está mal visto en otras ciudades de España, en las que la prostitución se encuentra mucho más alejada que en la propia Madrid (próxima a Gran Vía).
Nos queda mucho que aprender en este aspecto de otras ciudades, en las que todo está mas legalizado que en la "libertina" España. Véase en Amsterdam, Paris...

¿Por qué no se podría hacer asi?


Volviendo al tema de la zona de huertas, destacar esa abundancia de bares de todo tipo que invadían las calles, capaces de asestarte una "clavada" (sobre todo en Chueca, jeje), o de recibirte con precios mas que asequibles y con aceptable tapeo.





Me refiero , en concreto, a un bar llamado "Taberna Andaluza La Gitana", donde se servían cervezas Alhambra de 3 o 4 tipos (normal, negra, especial, reserva...) acompañado de una tapita (pisto, callos, etc...) en una pequeña cazoleta. No era mucho, pero estaba bien.






También hubo un hueco para el "reencuentro" con amigos "madrileños" naturales o de adopción, con los que casi nunca coincidimos, pero que siguen estando ahí. Pudimos coincidir con Susana , 10 años después, ¡Qué recuerdos! Nos deben una visita ella y Jorge. Al igual que Raúl, el soltero de oro de Vallecas...


Y, por último, el Musical.

La verdad, que me sorprendió gratamente, pero me decepcionó el teatro Movistar. Parece mentira como un musical con la repercusion que ha tenido y tiene, se celebre en un teatro tan pequeño y con tan mala o poca visibilidad en algunos puntos del mismo. Fue el único "pero".


Ahora que el Musical va a salir de Madrid, merecerá la pena verlo una vez conocido el teatro o sala donde se puede representar en las distintas ciudades donde acuda (Murcia, octubre de 2008).

Tampoco faltó un paseo por el rastro madrileño en la parada de "La Latina" sobre las 11 (la hora buena) , para poder "pescar" algo de ocasión, y ... así fue.


Despues de regresar a la "tierra donde vive el sol" y de descansar del viaje, sólo me queda una cosa por decir...


HOY YA ME PUEDO LEVANTAR (jeje..)


AG.